miércoles, 30 de noviembre de 2011

CREMA DE NARANJA Y…

Os presento un postre, merienda o golosina, que he realizado como el que no quiere la cosa (la cocina no tiene secretos para mí, ya sé barrer). Se trata de una crema muy, muy suave, hecha con zumo de naranja y…

Ingredientes:
1/2 litro de leche
6 cucharadas de leche
3 cucharadas de maizena
6 cucharadas de agua
La ralladura de la corteza de una naranja
2 yemas de huevo
El zumo de una naranja grandecilla

Preparación:
Echamos la leche en una olla pequeña, disolvemos el azúcar en ella y la ponemos al fuego (es conveniente encenderlo para que la leche llegue a hervir).
Rallamos, mientras tanto, la piel de la naranja, procurando no rallar la piel blanca de la naranja ni la piel de nuestros dedos, más que nada por higiene…
Aparte, disolvemos la Maizena utilizando las seis cucharadas de agua.
-Es poco agua.
-Pa disolver la Maizena, hay bastante…
-¡Vale, vale…!
Gírate a la izquierda y verás que la leche empieza a hervir, échale la Maizena disuelta y las ralladuras de la naranja y ve removiendo que si no se te harán grumos.
Remueve al menos tres minutos sin parar y retira la leche del fuego.
Mientras reposa un poco el contenido de la olla, bébete un vaso de agua o de algún refresco, y mezcla las dos yemas de huevo con el zumo de naranja que tenías que haber preparado en vez de beberte el vaso de agua.
Añadimos esta pócima al contenido de la olla y mezclamos.
-Mezcla bien, ¡con energía, coño!
- Vale, vale.. ¡qué carácter!
Volvemos a poner al fuego toda la mezcla y dejamos hervir otros tres minutos sin dejar de remover. Cuando empecemos a notar agujetas en el brazo, retiramos el brebaje del fuego, lo vamos poniendo en bols pequeños o copas de helado, lo dejamos enfriar y cuando esté bien frío lo metemos en la nevera.
La primera vez que yo lo hice, lo encontré algo soso, pero estando yo comentando este extremo con la queli, alguien que pasaba por la calle, llamó al telefonillo:
-¿Quiééénn?- dije con mala leche.
-Soy yo. Alguien que pasaba casualmente por aquí y he oído sus lamentos. ¿Por qué no prueba a echar chocolate caliente a la crema? De esa forma, la mezcla del sabor ácido de la naranja y el dulzor del chocolate van a producir en su paladar la sensación de que se está comiendo un bombón de naranja. Será una sensación envolvente, embriagadora, diferente…
-Suba, por favor – le dije encantado.
Así lo hizo, y, desde entonces vive con nosotros en casa. Aún no sabemos cómo se llama, pero cocina de miedo.
No se os vaya a ocurrir, además, añadirle mermelada de naranjas amargas. Os moriríais de placer y no tengo ganas de ir de entierro.

1 comentario:

  1. ¿¿ Todas las "cocinitas " las haces de esta forma ?? parece complicada...pero en el fondo, en el fondo...supongo que será facil....
    Habra que probarla.

    ResponderEliminar